La necesidad: “Pituto”

Por esas casualidades de la vida, hace un tiempo atrás me llamo la Pauli, una amiga de cerca de la casa, y de toda la vida, la cual me ofreció pega los fines de semana, el asunto es el siguiente:

Yo pongo el auto, manejo
Ella se baja en las casas a entregar una carta de cobranza del banco que mejor no decir cual.

Me pagan la bencina, por kilometraje y por carta entregada, = dependiendo de eso el dia lo pagan entre 10.000 y 20.000 pesos, sin presiones ni nada.

Acepte y el domingo salimos a la primera ronda, fue muy entretenido nos acompaño el pololo de la Pauli, y en eso recorrí todo Maipú, cerrillos y llegamos a renca y Quilicura, termine lo que me faltaba de conocer en Santiago.

LA diversidad que nos entrega stgo. es abismarte, con diferencia de solo unas cuadras, el entorno cambia drásticamente, gente viviendo en casas y edificios amontonados, con calles que solo cabe un auto, barro horrible , si bien es una realidad que conozco, nunca pensé que fuera tanta.

Otra cosa inquietante es el nivel de endeudamiento, ufff las cartas de cobranza eras de cuentas corrientes saturadas incluso por millones de pesos, en cambio otras de casas que se notaba que había costado conseguirlas y solo eran de un mes o dos de atraso, pero el banco ninguna piedad.

Las personas se desasían en explicaciones cuando les pasábamos las cartas, que pagué el lunes, o el jueves, o que estoy cesante y cosas así.

Cuando entregamos las cartas, la gente tiene q firmar y dar un teléfono, si conseguimos el celular, nos pagan mas por carta, pero 7 personas nos dijeron que no tenian celular, extraño ¿???

En fin la situación es rara, por que llegue a la conclusión que no quiero tener ni cuenta corriente, pero sin ella en un mundo adulto, no se es nadie, peor quiero vivir en paz, pero tb quiero acceder a un montón de cosas, q si no me involucro en un crédito bancario o algo así, no obtendré

Gracias a Dios que queda mucho para eso…